domingo, 13 de abril de 2008

Boda a través de Internet

"¿Te casas conmigo?". Todo el mundo esperando el "sí, quiero" de la novia pero en ese momento se cayó la conexión a Internet. Supuestamente la culpa fue de la suegra del novio que había tomado lecciones de cómo hackear y había introducido un virus en el sistema informático del juzgado.

La celebración de la boda fue en la página web del restaurante Le Coude Fou que tuvo tantas visitas que el servidor donde está alojada esa página web se colapsó. No degustaron pero sí leyeron el menú de este famoso restaurante parisino consistente en filet de cannette aux kumcoats y entrecôte au bleu d’Auvergne.

La noche de bodas la pasaron teniendo abierta la página web del Hotel Burj Al Arab (en idioma árabe, "Torre de los árabes") que es el único hotel del mundo de siete estrellas y que se encuentra en Dubai. Mientras tanto, los novios mantenían una videoconferencia a través del programa Skype teniendo abierto a su vez el Messenger de Yahoo por si se les bloqueaba el otro programa.

Eso sí; la gran noticia es que la SGAE no cobró el canon que usualmente aplica si se quiere tener Música en la celebración de este tipo de eventos sociales.

Evidentemente, todo esto que he relatado es ficción, o al menos eso creo. Lo que sí es cierta es esta noticia que he leído en la edición digital del Diario de Sevilla en la que comenta que una pareja brasileña se ha casado "por poderes" a través de Internet. El, brasileño que vive actualmente en China y ella, también brasileña pero residente en Francia.

Según el periódico "Folha On Line" (caray con el nombrecito), el juzgado de Sao Paulo, donde tuvo lugar la original boda, necesitó para consumar el enlace matrimonial tres ordenadores conectados a un popular programa que, a través de Internet, permite realizar videoconferencias de manera gratuita.

Así, el juez tenía interconectado por uno de ellos al novio, por otro a la novia y por el tercero a los padres del novio, que estaban en Barcelona (España).

Los padres de la novia fueron los que estuvieron presentes de forma física en la ceremonia, que sólo fue efectiva gracias a la intervención de los procuradores.

En un matrimonio por poderes como éste, el único "sí" válido para que la unión quede legalmente constituida es el que dan los procuradores, que, con permiso de los novios, ejercen de ellos y firman los papeles.

Sin embargo, el juez también preguntó a través de la pantalla a los novios para que estos confirmasen que sí querían casarse y, de este modo, darle más emoción a la ceremonia.

No es tan extraño que esta inusual forma de darse el "sí quiero" haya sido empleada por brasileños, puesto que los internautas de este país encabezan los primeros puestos en cuanto al número de horas diarias que navegan por Internet.

En 2006, según un estudio de la consultora Ibope-NetRatings, los usuarios brasileños de Internet eran los que más navegaban de todo el mundo con una media de 21 horas y 39
minutos mensuales.

Por lo que a mi respecta, los nuevos esposos tienen mi bendición, aunque virtual. Obvio.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Llámame antigua,retrógrada y lo que quieras, pero no me emociona, donde esté una buena boda, con su chimpún posterior, los novios agobiados por los invitados horteras (que todos nos preguntamos cuando se callarán), gritando cada media hora que se besen, que se besen...
A mí esta boda en el ciberespacio me recuerda al tío de Alcalá, ni boda ni ná.
Besos castos, vecino