miércoles, 20 de abril de 2016

Seguros para músicos

Hace 20 años mi amigo Alejandro López, quien por aquella época trabajaba para la rama de un banco que se dedicaba a los seguros, me propuso que me hiciera un seguro para mis manos. Lo rechacé.

Otra persona también quiso hacerme un seguro para mis instrumentos musicales. La misma suerte corrió.

Con el paso de los años y la experiencia vital que voy acumulando cada vez tengo más claro que la mayoría de la gente no se preocupa de su propia seguridad, sólo de su integridad física, y de esto último sólo unos pocos. Aquí, lo que importa es sólo cómo hacerse famoso componiendo "la canción del verano", hacerse famoso, ganar dinero, intentar tener bienestar y poco más, en líneas generales.

"Nunca me va a pasar nada". Frase recurrente que todos, en nuestra maravillosa urna de -frágil- cristal que nos ofrece la juventud -esa "Juan sin miedo"- llevamos a gala hasta que las cosas nos suceden.

Esto es igual que lo que pasa con el pronóstico del tiempo. Mucha gente no se preocupa qué tiempo va a hacer y luego pasa lo que pasa: salen de sus casas sin paraguas y luego se mojan. Como mal menor, se mojan.

Con el tiempo, he comprobado lo necesario que es tener coberturas personales ante siniestros, accidentes o enfermedades.

Me resulta muy complicado en mi profesión de músico encontrar a otros compañeros que, como yo, tengan mínimamente contempladas las bajas por enfermedad, accidentes e invalidez (parcial, permanente o absoluta) mediante la contratación de seguros.

Con esto que escribo no quiero hacer publicidad -ni tan siquiera publicidad contextual- de ninguna compañía que se dedique a hacer seguros de vida, accidentes o de lo que sea. Lo que quiero es llamar la atención de mi sector profesional sobre la necesidad y el beneficio personal que reporta el tener cubierto un mínimo de cosas que, Dios no lo quiera, suelen suceder.

Porque lo que leemos en los periódicos o nos cuentan que le ha pasado a alguien le puede pasar a cualquiera. Incluso a ti que estás leyendo esta entrada del blog.

Tampoco hay que dejar de lado el contemplar la prevención de riesgos laborales que es más o menos lo de las previsiones meteorológicas, pero aplicado al trabajo de músico.

Luego y con el paso del tiempo vienen las enfermedades. Que sí: empezamos con tener "goteras" y acabamos teniendo cánceres y otras mil cosas más que nos impiden realizar nuestra profesión. No te olvides que nuestra actividad laboral tiene un marcado carácter físico: viajes, horas sin dormir, aplicar la vista, problemas con articulaciones, etc.

Mi recomendación: asegúrate e infórmate ahora. Quizás luego sea tarde.

P.D.: Si necesitas alguna orientación al respecto, déjame algún comentario aquí, lo revisaré e intentaré orientarte.

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