Estaba resisitiéndome a escribir sobre el complicado tema de la reacción del Islam a las palabras de Benedicto XVI y, aunque no quiero meter otro palito en la candela, sí quisiera decir algo al respecto.
He releído el parrafito de marras y por más vueltas que le doy me pregunto que si Su Santidad no puede nombrar la palabra "Mahoma" en su vida. Vamos, que me recuerda a aquella canción de Gaby, Fofó y Miliki en la que no se podía decir ni barba ni pelo.
Además de seguir sin ver esas ofensas hacia el Islam que se quieren ver, pienso que el Papa debe tener libertad para hablar. Por supuesto, decir que tenemos la suerte de tener un Papa que, precisamente, no tiene un pelo de tonto. Todo lo contrario: es un erudito teólogo profundo conocedor de la Biblia, la Thorá y el Corán.
Esperemos que el viernes, día convocado por los islamistas para echarse a la calle y protestar por el discurso del Papa en Alemania, no tengamos que lamentar desgraciados sucesos.
Al menos ZetaPé (sí, el de la Alianza de las civilizaciones) se ha pronunciado a favor de Benedicto XVI y ha dicho: "que tó er mundo se tranquilise que aquí no pasá ná. Morito colegui pásame la chilaba que no te cobro ná por lo que me estás jasiendo sufrí".
Jactancia jacta est.
Entradas
No hay comentarios:
Publicar un comentario