Allá por el año 1977, el grupo musical Companyia Elèctrica Dharma grabó un disco con el título de "Tramuntana" el cual contenía una composición llamada "La Mediterranea Se'ns Mor...".
Nuestro pequeño Mediterráneo se llama Guadalquivir y si hace un par de años su nombre sonaba junto a los de los más importantes de Europa, hoy por hoy, este centenario Guadalquivir también se nos muere. Porque hace años estaba en la UVI, se recuperó y, por lo que acontece, de nuevo está en la UVI y "mu' malito".
Algunos notables expertos en galeras mantienen una reunión en el Hotel Macarena de Sevilla para este jueves convocando a sus ribereños allegados a su cruzada con el fin de unir sus flotas e intentar hacer historia cual Armada (In)vencible, que es como un yate (veré como acabas) de recreo contra el más grande portaacciones. Perdón: portaaviones.
Este singular río Guadalquivir, caudal de verdes pasiones, inspirador de odas (que según parece son plagios) a la palmera que más bien se asemeja a un canto ecologísta llamando a la protección del medio ambiente o, quizás, es apocalíptica ("El" final de la Palmera: ole,ole, a Belén, pastores) como digo, este río se nos muere. Of losts, to the river (de perdidos, al río).
Y si hace dos años los encargados del mantenimiento de la confederación hidrográfica de este particular Guadalquivir se vanagloriaban -con razón- de los logros alcanzados por sus navegantes hoy tienen que tirar de recuerdos y de épocas de coplas de Jorge Manrique como aquella de:
Nuestras vidas son los ríos
que van a dar en la mar,
qu'es el morir;
allí van los señoríos
derechos a se acabar
e consumir;
allí los ríos caudales,
allí los otros medianos
e más chicos,
allegados, son iguales
los que viven por sus manos
e los ricos.
Una pena. Este río, que cuando los romanos se llamaba Betis, el de la provincia bética de nuestra querida Hispania, se nos quiere hacer cartujo y, para colmo, el padre prior de este convento con su hábito manolitario trae vientos tramontanos de guerra. Pena, penita, pena da que bajen turbias las aguas que bañan la Villa Marín (era) que en su día llevase el nombre de Sevilla, de Andalucía y de España más allá de Alcalá de Guadaíra en épocas de copas de realeza. Y es que este Guadalquivir que ahora pasa por Jabugo en vez de producir jamón de pata negra pareciera que manufactura chorizo.
Que no pierdan la esperanza los ribereños y navegantes de este singular Guadalquivir y tengan presente otra copla manriqueña:
Recuerde el alma dormida,
avive el seso e despierte
contemplando
cómo se passa la vida,
cómo se viene la muerte
tan callando;
cuán presto se va el plazer,
cómo, después de acordado,
da dolor;
cómo, a nuestro parescer,
cualquiere tiempo passado
fue mejor.
Mientras tanto, una marea roja y blanca inunda Europa. Cada uno a lo suyo :-)
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Guadalquivir: río situado al sur de la Península Ibérica. Recorre la comunidad autónoma de Andalucía de este a oeste. Su nombre deriva del árabe wadi al-Kabir ("río grande"), mientras que los romanos lo llamaron Baetis, y a Andalucía, la Baetica.
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